En este post hablaremos sobre la parálisis del sueño, sus causas y algunas estrategias para evitarla.

La parálisis del sueño es un trastorno del sueño que se incluye dentro del grupo de las parasomnias. Afecta a un 5-10% de la población, aunque, por lo general, los episodios son poco frecuentes y en muy pocos casos es necesario tratarla^1-3.

¿Qué es la parálisis del sueño?^1-3

Durante el día, el cuerpo está en estado de vigilia, es decir, la persona está despierta y consciente. Una vez dormidos, el cuerpo pasa al estado de sueño, durante el que se alternan dos fases distintas según la presencia o la ausencia de movimientos oculares rápidos (REM, por sus siglas en inglés):

• Fase no REM: supone aproximadamente un 75% del tiempo que permanecemos dormidos y se divide en tres periodos, el adormecimiento (10%), el sueño ligero (45%) y el sueño profundo (20%).
• Fase REM: abarca alrededor del 25% del tiempo que permanecemos dormidos. Durante esta fase, el cuerpo no se puede mover, sin embargo, el cerebro está muy activo. Esta fase se caracteriza por la presencia de movimientos oculares rápidos y es en la que se producen los sueños. Además, también está relacionada con los procesos de memoria y aprendizaje.

La parálisis del sueño se desencadena debido a un solapamiento del estado de vigilia con la fase REM del sueño. La persona que la padece está despierta y consciente, pero su cuerpo sigue en fase REM y no puede moverse. Además, puede causar otros efectos que hacen que sea una experiencia bastante desagradable, como, por ejemplo:

• Sensación de angustia y pánico con opresión en el pecho y dificultad para respirar.
• Alucinaciones auditivas, táctiles y visuales.
• Sensación de que hay alguien o algo a su lado o detrás, aunque no puede verlo.

Estos episodios pueden durar desde unos pocos segundos hasta algunos minutos, y terminan por sí solos o cuando alguien interactúa con la persona afectada.

Causas de la parálisis del sueño^2,3

Las causas exactas de la parálisis del sueño se desconocen, pero los estudios apuntan a que los siguientes factores pueden propiciarla:

• Dormir poco o con un horario irregular.
• Cambios de zona horaria.
• Dormir boca arriba.
• Estrés o cansancio excesivo.
• Otros trastornos del sueño como la narcolepsia.
• Enfermedades mentales, como el trastorno bipolar, el trastorno de pánico o el trastorno de estrés postraumático.
• Tomar ciertos medicamentos.
• Consumo de sustancias nocivas.
• Predisposición genética: la parálisis del sueño puede heredarse, aunque es muy poco común.

Estrategias para evitar la parálisis del sueño^2-4

En la mayoría de los casos, la parálisis del sueño es tan poco frecuente que no es necesario pautar ningún tratamiento. El problema a menudo se resuelve corrigiendo o controlando su causa, por ejemplo, durmiendo lo suficiente, controlando el estrés o reduciendo el consumo de sustancias. También es muy importante mantener unos buenos hábitos de sueño, que incluyen:

• Dormir en un espacio agradable, silencioso, fresco y libre de distracciones.
• Mantener un horario fijo de sueño.
• Hacer ejercicio de manera regular, pero no justo antes de dormir.
• Evitar las sustancias estimulantes como la cafeína o la nicotina.
• Evitar el alcohol y las comidas copiosas antes de dormir.
• No utilizar dispositivos electrónicos antes de dormir.

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Referencias:

¹¿Qué es la parálisis del sueño? Clínic Barcelona. Junio, 2023.  

²Parálisis del sueño. Medline Plus. Abril, 2021.

³Parálisis del sueño. Revista Sanitaria de Investigación. Diciembre, 2021. 

⁴Buenos hábitos de sueño para una buena salud. Institutos Nacionales de la Salud (NIH). Mayo, 2021.