Hasta un 80% de los accidentes que sufren las personas mayores se producen en el ámbito doméstico.
Suponen la quinta causa de enfermedad (fracturas, quemaduras, atragantamientos, intoxicaciones, etc.), y, en algunos casos, pueden acabar desembocando en una discapacidad.
Son, además, la séptima causa de fallecimiento, por lo que deben ser considerados como un problema grave de salud pública. De hecho, pueden llegar a catalogarse como una epidemia de los países desarrollados, donde la esperanza de vida es mucho más alta que en los países con menos recursos1.
La mayoría se producen en casa, ya que es el lugar donde más tiempo pasan. La edad, el grado de movilidad, las enfermedades que padecen y la medicación que toman, factores de riesgo añadidos a la hora de sufrir un accidente.
Accidentes más habituales y cómo prevenirlos
Caídas: son los accidentes más comunes y la principal causa de lesiones, especialmente entre las mujeres. El 30% de los mayores de 65, y el 50% de los mayores de 80 años, se cae una vez al año2. Mantenerse activo y practicar ejercicios, siempre adaptados a cada edad y de manera regular, hará que los mayores se mantengan más fuertes, flexibles y enérgicos, minimizando el riesgo de tener un accidente y, muy importante, les ayudará a mantener la independencia durante más tiempo.
Medidas preventivas:
- Utilizar las barandillas siempre para subir o bajar escaleras y procurar que los descansillos estén libres de objetos para evitar tropiezos.
- Encender las luces por los lugares por lo que se transita.
- Utilizar zapatos cómodos, bien ajustados y con suela de goma.
- Instalar suelos antideslizantes.
- Tener cuidado con las alfombras y mantener, exclusivamente, las necesarias. El resto es mejor retirarlas.
- Evitar los suelos mojados (por ejemplo, después de fregar) y no caminar en casa con calcetines o con medias, ya que las superficies se vuelven más resbaladizas.
- En el baño, optar mejor por la ducha que por bañera. También que esta tenga suelos antideslizantes, agarraderas y una silla especial (si la movilidad es reducida o existe alguna incapacidad física).
- No levantarse de la cama bruscamente. Mejor esperar unos segundos sentados antes de incorporarse.
- Al levantarse por la noche, encender una luz para no tropezar con cualquier elemento que haya en la habitación3.
Incendios, quemaduras e intoxicaciones provocadas por gas: son accidentes también muy habituales, que en ocasiones pueden llegar a tener consecuencias fatales.
Medidas preventivas:
- Evitar los braseros de carbón. Son muy peligrosos, ya que un uso inadecuado puede producir gases potencialmente letales. Tener mucho cuidado si el brasero es eléctrico y se coloca bajo una mesa camilla, ya que la tela puede acabar ardiendo, y apagarlo siempre tras su uso.
- Las estufas de llama viva deben evitar colocarse cerca de cualquier material que pueda arder (cortinas, sillones, faldas de mesa camilla, etc.). Orear la habitación para evitar acumulación de gases.
- No conectar demasiados aparatos eléctricos en el mismo enchufe y desconectarlos después de su uso, además de no manipular los cables con las manos mojadas. No tapar las bombillas con telas como método para atenuar la luz.
- Al cocinar, tener cuidado con que los mangos de ollas, cacerolas o sartenes no sobresalgan del borde de la cocina. Tener especial cuidado con los líquidos hirviendo (aceite, leche, agua, etc.). Además, no usar delantales o paños con tela acrílica y no cocinar con mangas anchas, ya que pueden prenderse muy fácilmente.
- Si se cocina con gas, cerrar la llave después de hacer la comida.
- Mantener el cable de mantas eléctricas siempre en buen estado, ya que pueden provocar un cortocircuito.
- Si se fuma, no hacerlo nunca en la cama. Si se nota somnolencia en cualquier momento del día, por ejemplo, estando sentado viendo la televisión, apagar el cigarro inmediatamente. Optar por ceniceros con agua en el fondo para garantizar que el cigarrillo se apaga siempre.
- Instalar detectores de humos y gases4.
Intoxicaciones y atragantamientos: los accidentes más frecuentes de este tipo se deben a un control inadecuado de la medicación por un mal almacenaje de esta. También al mal uso de algunos productos de limpieza, además de a una mala conservación de alimentos. Los atragantamientos son también una importante fuente de problemas en el hogar.
Medidas preventivas:
- Conservar los medicamentos en su respectiva caja y, para evitar confusiones, escribir en la misma la dosis que debe tomar y para qué se los han prescrito.
- Elegir un lugar adecuado para guardar su medicación: un lugar fresco y seco, y que no esté al alcance ni a la vista de posibles visitas, especialmente de niños.
- Cuando se toma medicación para diferentes patologías, utilizar pastilleros en los que colocar la medicación semanal ayudará a tomar las dosis de manera adecuada.
- Si otro miembro de la misma familia también toma medicación es aconsejable mantenerla separada para evitar equivocaciones.
- Evitar la acumulación de medicación y vigilar la fecha de caducidad.
- Conservar los productos de limpieza lejos de cualquier alimento y mantener el etiquetado original. Ayudará a realizar un uso adecuado de los mismos, ya que pueden darse intoxicaciones importantes si, por ejemplo, se mezclan varios (lejía y amoniaco)
- Comprobar que el frigorífico funciona adecuadamente y respetar las fechas de caducidad de los alimentos.
- No conservar los alimentos a temperatura ambiente, ya que pueden contaminarse con bacterias perniciosas para la salud.
- Masticar mucho los alimentos y comer despacio.
- Si se es propenso a los atragantamientos, optar por texturas en pures o cremas.
- Seguir las instrucciones de su especialista si usa prótesis dentales.
En la calle, hay que ser especialmente precavido si se es conductor, porque se van perdiendo reflejos con la edad. Como peatón, se deben respetar los semáforos, cruzar por los lugares indicados para ello y mirar al subir y bajar escaleras (al igual que cuando se van utilizar los transportes públicos). También hay que prestar atención por si en las aceras de la calle existen desniveles, socavones y obras. Es en estas situaciones donde se produce la mayoría de las caídas en los espacios públicos.
En general, es fundamental acudir a las revisiones periódicas de agudeza visual y auditiva, mantener un control adecuado de las enfermedades que se padezcan y los tratamientos farmacológicos necesarios, no tomar medicamentos sin consultar con el médico, evitar la ingesta de alcohol y mantener los pies en el mejor estado posible4.
Referencias:
1 Los accidentes en las personas mayores I – Los accidentes como problema de salud. Ayuntamiento de Madrid. Servicios Sociales y de Salud. Página consultada el 14 de junio de 2021.
2 Prevención de caídas en personas mayores. Estilos de vida saludables. Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Página consultada el 14 de junio de 2021.
3 Carmen Estrada, Clara Esteban, Berta Lorente el al. Guía para la prevención de accidentes en las personas mayores. Dirección General de Salud Pública y Alimentación. Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Página consultada el 14 de junio de 2021.
4 Los accidentes en las personas mayores II – Cómo evitar los accidentes más frecuentes. Ayuntamiento de Madrid. Servicios Sociales y de Salud. Página consultada el 14 de junio de 2021.