En este post vamos a explicar qué es el estrés y cómo podemos evitarlo o reducirlo durante las vacaciones.
Las vacaciones son importantes y necesarias para recuperarse del estrés relacionado con el trabajo1. Diversos estudios han demostrado los beneficios y la repercusión positiva de las vacaciones en la salud de las personas2.
¿Por qué es tan importante descansar?
Algunos de los efectos saludables que tiene el descanso son2:
- Reducción del estrés: durante los días de descanso desconectamos de la presión laboral y las tareas del día a día, y nuestras responsabilidades se reducen. Este alejamiento de las principales fuentes de estrés ayuda a recomponer el estado de salud física y mental.
- Disminución de la presión arterial: la presión arterial desciende cuando nos relajamos, lo que puede contribuir a prevenir enfermedades cardíacas como la hipertensión.
- Mejora del estado emocional: la desconexión permite retomar las relaciones con amigos y familiares, y puede ser una oportunidad para establecer nuevas relaciones y vivir nuevas experiencias que mejoren la salud emocional.
- Mejora de la calidad del sueño: la reducción de estrés y el mayor bienestar ayudan a conciliar el sueño y mejorar la calidad de este.
¿Qué es el estrés?
El estrés es la forma en la que el cuerpo reacciona ante un reto o una demanda, y puede manifestarse de diferentes maneras3.
Los cambios, incluso aquellos que son positivos, como tener un bebé o recibir un ascenso en el trabajo, con frecuencia provocan estrés3.
Cuando nos enfrentamos a una situación estresante, el organismo responde acelerando el pulso y la respiración, tensionando los músculos y aumentando la actividad cerebral y el consumo de oxígeno del cerebro. Si la respuesta al estrés se prolonga demasiado, puede perjudicar a la salud4.
Síntomas del estrés
Cuando estás estresado puedes sentirte3:
- Preocupado.
- Enfadado.
- Irritable.
- Deprimido.
- Incapaz de concentrarte.
O que experimentes signos físicos, como3:
- Dolor de cabeza.
- Dificultad para dormir o exceso de sueño.
- Molestias estomacales.
- Aumento o pérdida de peso.
- Tensión muscular.
Además, el estrés puede debilitar el sistema inmunitario, lo que aumenta la probabilidad de enfermar.
¿Por qué el estrés puede continuar en vacaciones?
Aunque las vacaciones suelen asociarse con desconexión y tranquilidad, muchos trabajadores están inmersos en sus tareas habituales la mayor parte del tiempo y sufren episodios de estrés y nerviosismo cuando se acercan días libres2.
Este estrés puede aparecer en personas para las que el trabajo supone un aspecto tan importante de sus vidas que les da miedo el vacío que este deja en los periodos vacacionales2. El apego psicológico excesivo al trabajo puede impedir relajarse durante los días libres y conllevar problemas de sueño1.
Asimismo, la ausencia de planes o personas con quien compartir esos días o, todo lo contrario, es decir, el exceso de compromisos sociales, como visitar a amigos o familiares, pueden restar tiempo a la desconexión y al descanso y ser también fuentes de estrés2.
¿Cómo podemos eliminar el estrés en vacaciones?
El estrés, si es persistente, puede causar problemas de salud. Prevenir y controlar el estrés crónico puede reducir el riesgo de padecer problemas de salud como hipertensión, obesidad, depresión o problemas cardíacos3.
Estas son algunas formas de prevenir o reducir el estrés1,3,4,5,6,7:
- Planear con anticipación.
- Establecer prioridades: decidir qué cosas hacer primero y qué cosas pueden esperar para no sentirse abrumado.
- Estar preparado para afrontar situaciones estresantes.
- Viajar: para muchas personas, viajar en vacaciones les permite recuperarse del estrés laboral. El desplazamiento físico facilita el desapego del trabajo, por lo que es una experiencia de alivio.
- Mantenerse en contacto con otras personas que puedan proporcionarte apoyo emocional y distracción.
- Dejar tiempo en el día para hacer actividades relajantes, como leer o hacer yoga.
- Cultivar el sentido del humor: reírse mejora el estado de ánimo, relaja y reduce la respuesta al estrés.
- Evitar pensar obsesivamente en los problemas: enfócate en lo logrado, no en lo que no has podido hacer.
- Hacer ejercicio con regularidad: con la actividad física se liberan endorfinas que nos hacen sentir bien. Caminar unos 30 minutos al día puede ayudarte a levantar el ánimo y reducir el estrés.
- Reconocer que hay cosas que no se pueden cambiar te permite dejarlas pasar y no alterarte.
- Dormir lo suficiente: descansar por la noche es fundamental para pensar con más claridad y tener más energía durante el día.
- Mantener una dieta saludable: comer alimentos saludables como frutas, vegetales y cereales integrales, y evitar alimentos con alto contenido de azúcar te ayuda a mantener la salud y sentirte mejor.
Si los factores estresantes desafían tu capacidad para afrontar la situación o no logras reducir el estrés con medidas de cuidado personal, es posible que debas buscar ayuda, como la terapia o el asesoramiento de un profesional7.
Además, si eres asegurado de Adeslas, recuerda que tienes disponible nuestro Servicio de Asesoramiento Psicoemocional, donde podrás obtener más información.
Referencias:
1 Experiencias de recuperación durante las vacaciones y su asociación con el estrés laboral y salud. Scielo. Abril, 2017.
2 Los beneficios de las vacaciones para empresas y trabajadores. Universidad de Valencia. Julio, 2016.
3 Control del estrés. Health.gov. Agosto, 2022.
4 6 consejos prácticos para manejar el estrés. Cancer.org. Abril, 2019.
5 Manejo del estrés. Medline Plus. Noviembre, 2020.
6 5 formas de prevenir la acumulación de estrés. Teens Health. Consultado en septiembre, 2022.
7 Métodos para aliviar el estrés: consejos para dominar el estrés. Mayo Clinic. Marzo, 2019.