08/09/2021

Detrás de esas manchas que afean nuestra piel suele haber una larga historia de exposición solar sin la suficiente protección. Descubre cómo prevenirlas y tratarlas.

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Después de año y medio preocupados por los riesgos de salud asociados a la COVID-19, vamos recobrando la normalidad y, con ella, vuelve el interés por los problemas de siempre. Entre ellos está el de los efectos de las radiaciones solares sobre nuestra piel y, en concreto, el de las antiestéticas manchas faciales que pueden provocar.

Estas manchas son, en realidad, un mecanismo de defensa de nuestra piel, explican desde la Asociación Española de Dermatología, y suelen estar relacionadas con una historia de larga exposición solar¹. Para entender por qué se producen, debemos saber que dentro de las radiaciones solares encontramos la luz visible, la radiación infrarroja y la ultravioleta.

• La luz visible es responsable del envejecimiento cutáneo.
• Los rayos infrarrojos lo son de la deshidratación, la insolación y el golpe de calor.
• Las radiaciones UVB y UVA causan cáncer de piel, fotoenvejecimiento y, también, manchas.

Por tanto, la primera precaución que debemos tomar si queremos prevenir la aparición de las manchas será la de protegernos frente a esas radiaciones, evitando la exposición al sol sin la protección adecuada.

Tres tipos de manchas

No todas las manchas provocadas por el sol son iguales. Como explica la AEDV¹, podemos distinguir tres tipos:

Lentigo senil o actínico:

Afectan a zonas fotoexpuestas, como la cara, el cuello, el escote o los brazos. Como su nombre indica, suelen aparecer en personas de edad avanzada, a menudo con un largo historial de exposición solar.

Melasma:

Bastante frecuentes en mujeres embarazadas o que toman anticonceptivos hormonales, son manchas irregulares que suelen aparecer en torno a la frente, los pómulos y el brazo superior. Suelen hacerse más visibles con la exposición al sol, y reducirse en los meses de invierno. A menudo terminan desapareciendo.

Melanoma:

Ya no hablamos de una cuestión estética, sino de un cáncer cutáneo muy agresivo. El melanoma es una mancha que puede aparecer repentinamente o bien surgir de un lunar que ya teníamos. Ante una mancha con bordes irregulares y asimétricos debemos consultar al dermatólogo sin demora.

¿Podemos evitarlas?

El primer paso, como decíamos, es la prevención. Y, para ello, debemos ser especialmente cuidadosos en verano, pues no solo es cuando los días son más largos y más tiempo pasamos al aire libre, sino también porque los rayos de sol son más perjudiciales, ya que inciden sobre la Tierra de forma más perpendicular². Para evitar las manchas y el resto de los efectos adversos de la exposición al sol, el Ministerio de Sanidad hace las siguientes recomendaciones:

• No te expongas al sol en las horas centrales del día.
• Cúbrete la cabeza con gorras o sombreros.
• Disminuye las partes del cuerpo expuestas directamente al sol.
• Utiliza productos de protección solar con un factor elevado y que sea adecuado a tu edad, tipo de piel y zona del cuerpo.

Ya tengo manchas. ¿Qué puedo hacer?

Una de las cosas más importantes que debes tener en cuenta si te han salido manchas es que es fundamental que uses fotoprotectores. Es un error creer que ya no se puede hacer nada y que, por tanto, no es necesario cuidarse.

Fotoprotección:

Recuerda que, cuanto más clara sea tu piel, mayor será el factor de protección solar que necesitará³. La Asociación Española contra el Cáncer nos recuerda que debemos usar protectores solares que contengan filtros frente a los rayos UVA y UVB. Debemos aplicarlos sobre la piel seca, e irlo reponiendo con frecuencia, especialmente tras el baño.

Despigmentación:

Existen tratamientos estéticos para despigmentar la piel, bien mediante peelings químicos, bien mediante productos queratolíticos. Es importante que consultes tu caso a tu dermatólogo para decidir qué te conviene.

Láser:

También se puede utilizar para romper el pigmento sin dañar la piel sana¹, pero dependerá del tipo de mancha. Una vez más, el dermatólogo tiene las respuestas.

Con respecto a si la eliminación de las manchas es o no definitiva, la Asociación Española de Dermatología señala que el tratamiento de los lentigos es sencillo y con una única sesión suele resolverse. En el caso del melasma, en cambio, el tratamiento es más complejo y debe ser continuado a lo largo del año.

Recuerda que…

• Las manchas en la piel suelen producirse por exposición a las radiaciones solares.
• La prevención es la principal herramienta que tenemos para evitarlas.
• Utiliza de forma correcta los fotoprotectores solares y no abuses del sol.
• Si tienes manchas y quieres tratarlas, lo más prudente es consultar antes con un especialista.

 

Referencias:

¹ El DNI de las Manchas. AEDV. Junio, 2021

² Protección frente a radiaciones solares. Ministerio de Sanidad. Junio, 2021

³ Protección frente al sol. AECC. Junio, 2021