Todos los hogares deben tener un botiquín doméstico para realizar los primeros auxilios y tratar síntomas de patologías comunes ante las que no hace falta consultar a un profesional sanitario1.
Con la llegada del verano y de los viajes es todavía más importante que retires los medicamentos de tratamientos ya finalizados y te asegures de que dispones de material para curas (contusiones, picaduras de insectos y quemaduras)1.
El botiquín casero es una caja o mueble hermético que debe estar instalado en un lugar de fácil acceso y que todos los habitantes de la casa conozcan, pero fuera del alcance de los niños pequeños para evitar accidentes. En cuanto a su contenido, tiene que ser el suficiente para hacer frente a situaciones de escasa gravedad que se produzcan en el entorno doméstico1. Ante cualquier duda con respecto a la importancia del incidente, consulta a tu profesional sanitario de referencia.
En cada época del año podemos adaptarlo e incluir y excluir productos en función de las condiciones meteorológicas o nuestras necesidades personales y familiares.
Los imprescindibles para el verano3, 4
- Medicamentos (analgésicos y antipiréticos).
- Un termómetro (de fácil lectura y que esté en perfectas condiciones).
- Suero fisiológico.
- Algún producto antiséptico.
- Gasas.
- Esparadrapo.
- Tijeras de punta redonda.
- Pinzas.
- Vendas de diferentes tamaños.
- Vendas hemostáticas.
- Guantes de látex o vinilo.
- Repelente de insectos.
- Mascarillas.
- Gel hidroalcohólico.
- Protector solar (facial, corporal y labial).
- Sueros orales (para una posible deshidratación).
- Tapones para los oídos.
Lo que no debe tener tu botiquín
Un botiquín casero no debe contener restos de tratamientos anteriores ya finalizados que requieran prescripción médica, medicamentos sin prospecto, fármacos caducados, material oxidado (tijeras o pinzas) ni un termómetro que no funcione.
El botiquín de viaje
Para viajar es también fundamental que lleves un pequeño botiquín en el que incluyas tanto la medicación habitual de toda la familia como productos para curas básicas y medicamentos para hacer frente a pequeños contratiempos como una intoxicación alimentaria, una quemadura solar, una picadura de mosquito o un resfriado. Es importante que también viajes con material para curas básicas y un termómetro, así como fármacos para el mareo.
Además, es fundamental que lo guardes en un lugar que esté protegido de la luz, del calor y de la humedad y que lleves contigo los prospectos de los medicamentos por si tienes que consultar las indicaciones, incompatibilidades y contraindicaciones.
Otros aspectos que tener en cuenta4
- Las patologías crónicas de todas las personas que van a viajar y la medicación habitual de cada uno de ellos.
- El destino al que vais a viajar (el protector solar, la potencia del repelente para insectos… La necesidad de algunos productos dependerá del lugar en el que se vaya a disfrutar de las vacaciones).
- Optimizar el espacio y llevar únicamente material que sepamos utilizar.
Información importante3
La caducidad de los fármacos se puede comprobar tanto en la caja de cada medicamento como en el blíster en el que se encuentran las pastillas y se pueden utilizar hasta el último día del mes señalado como fecha de caducidad.
Y recuerda, periódicamente, y siempre antes de salir de viaje, revisa la fecha de caducidad de todos los medicamentos y productos y, si el termómetro que utilizas es de pila, asegúrate de que está en buenas condiciones. Si tienes dudas, tu médico o farmacéutico pueden ayudarte.
Referencias:
1 Atención Primaria recomienda revisar el botiquín doméstico para hacer frente a los principales problemas de salud en verano. Gobierno de Navarra. Junio, 2021
2 El botiquín de primeros auxilios en el hogar. Cruz Roja Española. Junio, 2021
3 El botiquín casero. Comunidad de Madrid. Junio, 2021
4 Conoce los imprescindibles en el botiquín de verano. Asociación para el Autocuidado de la Salud (ANEFP). Junio, 2021