En este post te contamos qué es el virus respiratorio sincitial, cómo se contagia y qué podemos hacer para prevenirlo.
El virus respiratorio sincitial es un virus que, en general, causa una enfermedad viral común que afecta al aparato respiratorio1,2. Se trata de una de las causas fundamentales de patología respiratoria en niños. De hecho, a la edad de dos años, la mayoría de ellos ya se han contagiado2-4.
Aunque es más frecuente durante la infancia y, especialmente, en los niños pequeños, también puede afectar a las personas adultas. En general, los síntomas que causan son leves, muy similares a los del resfriado común. Sin embargo, puede ser causa de patologías más graves y de ingreso hospitalario en el caso de bebés de hasta 12 meses, especialmente los prematuros, en las personas mayores, con patologías cardiacas o pulmonares crónicas, y también en los pacientes inmunodeprimidos1,2.
En lactantes menores de un año es el motivo más frecuente de neumonía (infección de los pulmones) y bronquiolitis (inflamación de las vías respiratorias del pulmón)2,5.
En general, este virus se presenta a finales de otoño y a principios de primavera4.
¿Cuáles son los síntomas de las infecciones del virus respiratorio sincitial?
Normalmente, entre cuatro y seis días después del contacto aparecen los síntomas que provoca este virus1,2. Los principales son1-4:
- Congestión y goteo nasal.
- Tos seca.
- Fiebre.
- Perdida del apetito.
- Estornudos.
- Dolor de garganta.
- Dolor de cabeza.
No suelen presentarse todos juntos, sino en etapas de manera progresiva1.
Además, en los casos más graves en que el paciente desarrolla neumonía o bronquiolitis, a estos síntomas se añaden otros1,2:
- Fiebre alta.
- Tos intensa.
- Sibilancias (pitidos al respirar) que se escuchan al exhalar.
- Respiración rápida (taquipnea).
- Dificultad para respirar.
En casos extremos (que requieren atención inmediata) también puede aparecer color azulado en la piel a causa de deficiencia de oxígeno, es lo que se denomina cianosis2.
En los lactantes de hasta un año que desarrollan enfermedad grave causada por el virus respiratorio sincitial, los síntomas que suelen aparecer son1,2:
- Dificultad para respirar. Puede observarse que se hunde el pecho del bebé al hacerlo.
- Respiración superficial (con un escaso desplazamiento del diafragma y las costillas), rápida y corta.
- Tos.
- Inapetencia. El bebé come mal.
- Cansancio y somnolencia profunda y prolongada (letargo).
- Irritabilidad.
En el caso de los niños pequeños, se debe solicitar asistencia urgente si4:
- Se producen pausas en la respiración o se hunde el pecho en la zona de debajo del cuello al hacerlo de manera significativa.
- Aleteo nasal.
- Uso de los músculos accesorios (se puede detectar si al respirar se notan las costillas, las clavículas o el esternón).
- Moja el pañal menos de una vez cada 8 horas, algo que es signo de deshidratación.
- Presenta un color grisáceo o morado en la piel, la lengua o los labios.
- Se reduce de manera significativa su nivel de alerta.
En general, tanto los niños como los adultos se recuperan en una semana o dos, aunque las sibilancias pueden prolongarse durante más tiempo2.
¿Cómo se contagia el virus respiratorio sincitial?
Se trata de un virus muy contagioso. Se propaga a través de las gotitas que expulsa una persona que ya tiene el virus cuando estornuda o tose3 o por contacto directo (por ejemplo, un beso)6.
Además, puede sobrevivir en las superficies y contagiar a personas que tocan objetos que están contaminados3. De hecho, en las superficies no porosas puede contagiar durante siete horas6.
Para que una persona contraiga el virus, tiene que estar en contacto con el mismo a través de los ojos, la nariz o la boca6.
¿Cómo se diagnostica y cuáles son los tratamientos para las infecciones por el virus respiratorio sincitial?
A la hora de realizar el diagnóstico, el médico utilizará la historia clínica del paciente, preguntará por sus síntomas y realizará un examen físico1.
Analizando la secreción nasal en el laboratorio, puede detectarse la presencia del virus. En el caso de las personas con infecciones graves, pueden añadirse otras pruebas como análisis de sangre y de orina o una radiografía de tórax1.
Al tratase de un virus, no existe un tratamiento específico para el virus respiratorio sincitial y no deben tomarse antibióticos, ya que estos medicamentos no son eficaces en este caso y, además, su uso inadecuado ocasiona las resistencias a los antibióticos, es decir, que no sean eficaces en el futuro. Sí es importante ir controlando la fiebre, mantenerse hidratado y comer solo si se tiene hambre1,2.
Consejos de prevención
La prevención de este virus es posible. De hecho, el uso de mascarilla y la distancia física que ha provocado la pandemia de la COVID-19 ha reducido de manera significativa los casos4.
Algunas pautas y recomendaciones son2-4:
- Lavarse las manos con frecuencia.
- No compartir cubiertos ni vasos con otras personas.
- Evitar fumar, especialmente si el humo puede llegar a los niños.
- Aislarse al notar síntomas de fiebre y, sobre todo, no estar cerca de bebés.
- Limpiar los objetos que se tocan con frecuencia, como por ejemplo los pomos de las puertas, de manera habitual.
- Lavar los juguetes de los niños.
- Taparse la nariz y la boca con el codo al toser o estornudar.
Ten presentes estos síntomas, toma precauciones con las personas más vulnerables como niños o ancianos y, ante cualquier duda, consulta con los profesionales sanitarios.
Referencias:
1 Virus respiratorio sincitial. MedlinePlus. Diciembre, 2021.
2 Virus respiratorio sincitial (VSR). Mayo Clinic. Enero, 2022.
3 Virus respiratorio sincitial. KidsHealth. Agosto, 2021.
4 Virus sincitial respiratorio (VSR): cuando el problema es más que un simple resfriado. HealthyChildren.org. Agosto, 2021.
5 El virus respiratorio sincitial: más que una infección pediátrica. Nursing. Marzo-abril, 2016.
6 Virus respiratorio sincicial (VRS). AEPED. Consultado en febrero, 2022.
